Amaia Diez, de obligación a pasión por el baloncesto. Ahora estudia y compite en York College 
La jugadora de baloncesto navarra, llegó a Estados Unidos gracias a una beca deportiva para estudiar en la Universidad de York College en Nebraska. Cada día más chicas ven está opción como una oportunidad para conseguir el graduado universitario y competir al más alto nivel. Descubre como Amaia comenzó en el baloncesto y luego conoció cómo funcionan las becas para estudiar en Estados Unidos. El tiempo pasa rápido, ya van dos años allí.
¿Cómo fueron tus primeros pasos en el baloncesto? ¿Cuál ha sido tu trayectoria en España?
Empecé a jugar al baloncesto en el colegio a los 7 años. Me apuntó mi madre, a mí no me gustaba ir pero ella insistía que tenía que ir. Estuve dos años en el equipo del colegio “Luis Amigo” y después me fui al Mutilbasket en el que he estado toda mi vida.
Justo la temporada antes de irme a Estados Unidos fue una de la mejores de mi carrera. En mis temporadas aquí en Pamplona participé en varios campeonatos de España con mi equipo y también jugaba con la selección Navarra, con la que jugué 4 campeonatos de España.
¿Cómo se cruzó en tu camino la opción de estudiar en USA?
En Pamplona hacen todos los años una feria en Baluarte, a la que asisten las universidades españolas y diferentes empresas. Justamente el año que yo fui había un stand de AGM para ir a estudiar a Estados Unidos. A mí madre le pareció buena idea que nos informáramos, le llamaba la atención lo típico del “sueño americano”. Ya con toda la información de los exámenes, hacer el perfil de vídeos y todo en nuestras manos, hablamos con vosotros y tomamos la decisión.
¿Conocías el proceso para conseguir una beca? ¿Cómo lo recuerdas?
No tenía ni idea de como funcionaban las becas, ni como se podían conseguir. El proceso lo recuerdo un poco estresante la verdad. Lo hice todo en bachiller. La primera vez que hice el SAT estaba en primero de bachiller, pero como no saque muy buena nota lo repetí al año siguiente. En segundo lo malo es que me coincidió con los globales. También, me acuerdo que tenía unas clases de SAT por la noche, las hacía siempre después de entrenar y de normal llegaba un poquito tarde. Fui un poco de un lado para otro sin parar.
Por otro lado, a la hora de hacer el vídeo como estaba siempre con los exámenes no tenía tiempo. Al final mis entrenadores me ayudaron y conseguimos un buen vídeo.
¿Qué sentiste al firmar con la universidad? ¿Cómo fue ese momento?
Recuerdo que fue a finales de Junio, un poco tarde. Tuve bastantes ofertas de varias universidades pero ninguna de ellas iban más allá. Cuando fui admitida en “York College” y ya estaba todo confirmado me sentí súper tranquila y relajada. Me pilló justamente de vacaciones con mis amigas y fue un alivio total. Por fin sabía que iba a hacer con mi vida.
En tu llegada a USA ¿Te acogió bien el equipo? ¿Cómo fueron los primeros días?
Antes de ir no conocía a mucha gente del equipo, pero lo bueno es que donde estoy se hacen actividades con los alumnos nuevos para conocerse. Aquí le llaman “génesis”. Te enseñan la universidad, se hacen juegos y se preparan comidas. En esos tres días conocí a todo mi equipo y a mucha más gente de primer año y de otros.
Los primeros días fueron un poco duros. Yo sabía inglés pero no es lo mismo lo que aprendes en el colegio con lo que te encuentras allí y empiezas a vivir la experiencia. Al principio la gente no me entendía mucho y yo a ellos tampoco. Conocí a un chico chileno que me ayudó a conocer a gente y me dio consejos para cuando hablará en inglés, me vino de lujo. Me fui apañando y después salió todo muy bien.
¿Cómo han sido tus primeros años en esta experiencia?
Llevo ya dos años y la verdad que ahora estoy bien, muy contenta. El idioma fue el obstáculo del primer año pero me he acostumbrado. En clase entendía todo y tenía amigos que se esforzaban por ayudarme y entenderme aunque siempre hay gente que pasa de hacer ese esfuerzo.
¿Qué diferencias ves en el baloncesto respecto a España? ¿Qué es lo que más te ha sorprendido?
La mayor diferencia que yo veo es que todo es mucho más físico. Yo en la vida había ido al gimnasio, nunca había pisado uno hasta que llegué a Estados Unidos. Tengo que decir que luego en el campo se nota. Aparte, lo que más me chocó del juego son algunas normas que hay, se pueden poner seis personas al rebote o que no exista el campo atrás si sacas de banda.
¿Cuáles han sido tus éxitos a nivel colectivo y personal?
A nivel colectivo aún no hemos conseguido ninguno. Personalmente he mejorado mucho, sobretodo físicamente y tengo buenas estadísticas. Como todo el mundo tengo algún partido algo más flojo pero a nivel de puntuación tengo muy buenos números.
Decidiste estudiar Biología ¿Cómo es el modelo educativo, te parece complicado? ¿Lo compaginas bien con el baloncesto?
El primer año me recordó mucho a lo que había hecho de biología en bachiller aunque después tenía muchas asignaturas diferentes. En el primer curso las clases son más generales. Me parece un sistema educativo muy interesante, menos específico de primeras.
Lo puedes compaginar muy bien, aquí eres primero estudiante y después deportista. En la universidad nos tienen muy en cuenta y siempre que tenemos algún partido entre semana y te tienes que ir antes lo entienden y te mandan las cosas después. También, nos cambian las fechas de los exámenes si vamos muy justos de tiempo. Es mucho más fácil. Además, tenemos los entrenamientos siempre después de las clases para no tener ningún problema.
¿Has viajado mucho en estos años?
Yo juego en la conferencia central y los viajes que hemos hecho con el equipo han sido en Nebraska, obviamente, y luego por Kansas y Oklahoma. Más allá de eso no he viajado mucho. Por ahora no he tenido la oportunidad de visitar mucho más, tan solo los viajes que he hecho con el equipo de baloncesto.
¿Qué es lo que más te ha llamado la atención de la cultura americana o de los americanos?
Te diría lo que dice todo el mundo, la comida. Aunque soy de las que piensan que tampoco es tan complicado comer bien como se ve en España. Se tiene la imagen de comida basura y “fast food” pero yo tengo la oportunidad de comer sano. Luego que elija comer más o menos sano es decisión mía, pero se puede conseguir. Cada uno come lo que quiere y tiene mil opciones. Tengo que decir que sí, es cierto que se come mucha comida rápida pero no todos estos sitios son de comida basura.
Hablando de la comida ¿Cómo te has apañado, cocinas tu?
Yo este año tengo una cafetería que es tipo buffet y cada uno tiene su plan de comidas semanales. Por eso decía que tienes la opción de comer sano porque en el propio buffet tienes platos más saludables para escoger.
Además, yo trabajo ahí. En Estados Unidos mientras estás en la universidad puedes encontrar diferentes trabajos dentro del propio campus y yo este año estoy en la cafetería. Al ser deportista no tengo un horario fijo por los entrenamientos, así que puedo ir antes o después. He estado lavando platos, sirviendo comidas o depende de a la hora que voy dejo todo preparado antes de abrir o ayudo a recoger al cerrar ¡hago de todo!
¿Qué planes tienes para estos años?
A nivel personal uno de mis objetivos es viajar más, sacarme la carrera y seguir con el baloncesto. El resto la verdad que aún es pronto y no lo tengo muy claro. Llegar al baloncesto profesional en Estados Unidos es muy complicado, así que por ahora no pienso en ello. Aquí al acabar la carrera todo el mundo empieza a trabajar, no es como en Europa que tienes opciones diferentes.
Lo que también me he planteado es hacer prácticas aquí. Hay veces que cuando vuelves a España algunas carreras son más complicadas para convalidar el título o tienes que hacer un año más o un Máster.
¿Cómo definirías la experiencia? ¿La recomendarías?
Es una experiencia que te hace crecer como persona y si tienes la oportunidad es totalmente recomendable. Si lo puedes hacer es algo muy necesario.
