Alberto Uriach, golfista de Webber International University: «Era un sueño que se convirtió en realidad»
Alberto Uriach es un golfista de Barcelona que decidió comenzar la aventura americana en Webber International University, Florida. Su pasión por el golf le llevó a cruzar el atlántico para continuar creciendo como jugador y poder compaginar los estudios universitarios. ¡Vamos a conocer más sobre Alberto!
¿Cómo fueron tus primeros inicios en el golf? ¿Qué torneos solías jugar en España?
Mi padre fue el que me inicio en el golf desde muy pequeño, mucha gente mi familia ya jugaba. Yo empecé a jugar al golf en la escuela del Real Club de Golf El Prat, club en el cual mi familia siempre ha sido socia. Allí he conocido a grandes jugadores y he hecho muchos amigos durante todos estos años y hasta día de hoy.
No solía jugar muchos torneos por España la verdad, solo los torneos a nivel autonómico. Sí que había tenido la oportunidad de jugar algún torneo de España, ahora con el nivel que tengo, puedo optar a entrar y competir en todos los torneos nacionales.
¿Cuándo apareció la oportunidad de estudiar y competir en USA? ¿Cómo te enteraste?
Mi sueño siempre fue jugar a golf, pero en España sabía que era imposible, combinar estudios con deporte, a cierta edad no es fácil. Cuando tenía 15 años lo tenía muy claro que América, era un sueño que se convirtió en realidad al cabo de los años. Una vez que acabe el colegio en España me fui un año a EEUU, a una academia de golf. Después pasé a la universidad, fue una buena decisión porque el proceso es lento y largo y siempre quieres elegir.
Siempre que me pregunta la gente recomiendo que empiecen el proceso a los 16 años. En mi caso empecé con 17 años, y me di cuenta que no llegaba lo que me gustaba. Decidí esperarme un año más para poder buscar algo que me pudiera encajar y a la vez de mejorar mi nivel de inglés y golf al mismo tiempo.
En mi caso tuve la suerte de contar con el equipo de AGM Sport, me ayudó mucho durante todo el proceso e incluso hasta día de hoy me siguen ayudando después de cuatro años.
¿Fue una decisión fácil para ti? ¿Qué te empujo a tomarla?
Si, para mí fue una decisión fácil. Siempre quise seguir compitiendo, y sabía que en España combinar deporte y estudios a un cierto nivel iba a ser muy complicado.
Lo que me empujo a tomar la decisión, por supuesto el apoyo de mis padres, pero sobretodo no tener miedo al fracaso.
A toda la gente joven que me pide consejo para ir a estados unidos siempre les digo lo mismo: “Si tienes la oportunidad de probarlo, pruébalo. Tu casa siempre será tu casa, y si no te gusta, siempre puedes volver a ella. Pero, no te arrepientas el día de mañana de no haberlo probado, habiendo tenido la oportunidad. Una vez después de que lo has probado puedes valorar si te gusta o no, no antes”
¿Cómo recuerdas el proceso para conseguir la beca?
Es un proceso lento, porque es una cosa desconocida. Yo siempre recomiendo empezar con dos años de antelación el proceso. Cuanto más tiempo tienes, mejores cosas puedes encontrar, y mejores opciones te pueden salir.
Yo empecé el proceso a los 17 años, era mi último año de colegio, y tuve la suerte de ir a una academia de golf durante un año antes de entrar a la universidad, me dio mucho margen para poder encontrar mejores universidades y tener un proceso de selección con más detenimiento. Además tuve la suerte de contactar con AGM Sports. Me ayudó muchísimo en todo.
La forma en la que trabajan el equipo de AGM es espectacular, hasta día de hoy tengo contacto con ellos. Gracias a ellos después de haber acabado la universidad, les contacte para que me ayudaran con el papeleo del máster y el tema del visado. Si no fuera gracias a ellos, el Fall 2020 no podría empezar a hacer el máster.
¿Recuerdas cómo fueron tus primeros meses al llegar a Estados Unidos?
Como antes dije, antes de empezar la universidad, estuve un año en una academia de golf que me ayudó mucho a mejorar en muchos aspectos, sobre todo en el idioma y madurar como persona. El deporte es una cosa muy importante pero aún es más importante es sentirse realizado como persona. Una vez acabado este año, me ayudó mucho a entender la cultura americana y a adaptarme a su mentalidad.
Los primeros meses de universidad fueron muy buenos, conocí a mucha gente, y tuve la suerte de que cuando entre había un grupo de 9 españoles, que estaban en distintos deportes. Me ayudaron mucho a conocer gente y a adaptarme al lugar, a día de hoy después de casi 7 años sigo teniendo el contacto con todos ellos.
¿Cómo has visto el nivel del golf en USA? ¿Te sorprendió?
El nivel de golf en USA es alto, lo bueno es que tienes la oportunidad de poder competir contra mucha gente de muchos países y a la vez conocer y hacer nuevas amistades con personas de distintas nacionalidades que vas viendo durante todo el año en distintas competiciones.
Sí que me sorprendió al principio porque era nuevo, pero después me di cuenta de que podía alcanzar el mismo nivel o en alguno momento mejorarlo. Durante los primeros torneos en la universidad me sorprendió que en el top 15 casi siempre quedaran las mismas personas, pero después me di cuenta de que juega mucho a favor el ser “senior” por haber jugado en el mismo campo durante cuatro años las mismas competiciones. Entonces ya no me sorprende tanto.
¿Y los estudios? ¿Te ha sido fácil compaginarlo?
Sí, ha sido muy fácil compaginarlos, en mi caso tuve mucha suerte con mi coach, profesores y universidad. Siempre me dieron muchas facilidades para poder compaginar las dos cosas sin ningún problema, sobre todo cuando tenías torneos y exámenes, al final como mucho va por internet, es muy fácil recibir la información de las clases y poder entregar los trabajos a tiempo sin tener que estar físicamente dentro de la universidad.
Tienes que ser una persona disciplinada, porque tienes que asegúrate de que todo lo compaginas bien, la disciplina se va cogiendo mientras se va ganando experiencia y uno encuentra la mejor forma para que le vaya bien a uno mismo.
En estos cuatro años ¿Has viajado mucho? ¿Qué sitios te han impresionado más?
He tendió la oportunidad de estar en diferentes estados durante mis cuatro años. El equipo de golf me ha dado a conocer sitios que creo que en mi vida hubiese imaginado poder haber estado, conocido o entrado por su exclusividad.
Estados en los que estado en competiciones de golf han sido: Florida, Alabama, George, Carolina del Norte, Carolina del Sur.
Una de las mejores experiencias que tuve fue en Carolina del Norte dónde estábamos residiendo en una base militar americana, Marine Corps Base Camp Lejeune. Esta base militar mide 629km2, que es 6 veces la superficie de Barcelona o un poco más grande que la superficie de Madrid.
Estaba todo vallado y solo había un acceso de entrada que era el mismo que el de salida, la única forma de entrar es con invitación de algún marine. Tienes que llevar el pasaporte y el visado para que te dejen entrar, eso sí únicamente con autorización. Una vez dentro es una gran ciudad dónde puedes ver por la calle tanques, coches de guerra o incluso despertarte, como me paso a mí, por la mañana con el sonido de las pruebas que están haciendo con las granadas.
¿Qué destacarías de la cultura americana y de su gente? ¿Te ha impactado alguna fiesta en particular o evento?
Lo primero que diría es que la cultura americana es diferente a la española, mucha gente piensa que son muy similares, pero realmente son muy distintas. Lo que más destacaría que me impacto mucho es la forma de vivir, les gusta mucho comer fuera y comer cosas grandes. En España, tenemos una cultura gastronómica muy buena y bastante sana, sobre todo si la comparamos con la americana.
Es divertido comer hamburguesas y pizzas durante una semana, porque es lo que ves en las películas, pero después de 10 días te apetece volver a comer cosas sanas. Nunca hubiese dicho que echaría de menos una cosa tan simple como una buena ensalada con buenos productos, frescos.
También, me impacto mucho la intensidad con la que viven todos los deportes la verdad, aunque tenemos que entender que es un país de 350 millones de habitantes, y España 50 millones. Pero ni el fútbol americano, ni la NBA o el béisbol, me refiero a la pasión y la cantidad de gente que juega al golf. Es algo increíble, lo que más me gusta es el cómo los americanos disfrutan jugando.
En España, el golf es un deporte muy serio, la gente tiene que seguir todos los protocolos al pie de la letra, nos olvidamos de ir a jugar y divertirnos sin tener que competir todo el día. Lo que más me gustó fue encontrarme a gente entre 30 y 60 años todos mezclados jugando juntos, escuchando música en los carritos de golf y disfrutando del día mientras jugaban tomando sus bebidas. Es una cosa que en España es inconcebible.
Una vez graduado ¿Qué planes tienes de cara al futuro?
Pues ahora con el tema del COVID-19, todo ha dado un giro de 180 grados la verdad. Mi idea era jugar a nivel profesional y ver hasta qué nivel podía alcanzar hasta 2022, y después de eso tomar una decisión, si ver que podía competir a un buen nivel o no. Pero con todas las cancelaciones de las escuelas, de los circuitos y muchos de los torneos a nivel nacional e internacional, he decido apostar por hacer un máster.
Voy a ir a la misma universidad, me han ofrecido una muy buena beca y gracias al año extra de elegibilidad que nos han dado las ligas universitarias, podre competir con la universidad un año más, que es lo que dura el máster y después me volveré a plantear mi futuro y los próximos pasos que dar.
Después de todo lo que estamos viviendo, te das cuenta que la vida te puede cambiar en un momento u otro y que los planes que tenías en mente no salgan como uno se lo había imaginado.
¿Cómo definirías la experiencia? ¿La repetirías?
Una experiencia maravillosa, me lo he pasado super bien, y cometería todos los mismo fallos y aciertos para acabar en el mismo sitio con toda la gente que he coincido durante todos estos años, otra vez.
Repetiría una y otra vez, es una experiencia única que se me ha hecho corta. El último semestre, mis compañeros de universidad que empezaron conmigo el mismo año y yo,nos decíamos los mismo “ojalá pudiéramos empezar de nuevo otra vez para poder vivir estos 4 años una vez más”.